28 de julio de 2012

21 de julio de 2012

Religiones

Qué hará la iglesia si nunca más muere nadie, Nunca más es demasiado tiempo, incluso tratándose de la muerte, señor primer ministro, Creo que no me ha respondido, eminencia, Le devuelvo la pregunta, qué haría el estado si no muere nadie nunca más, El estado tratará de sobrevivir, aunque dudo mucho que lo consiga, pero la iglesia, La iglesia, señor primer ministro, está de tal manera habituada a las respuestas eternas que no puedo imaginarla dando otras, Aunque la realidad las contradiga, Desde el principio no hemos hecho otra cosa que contradecir la realidad, y aquí estamos, Qué dirá el papa, Si yo lo fuera, que dios me perdone la estulta vanidad de pensarme como tal, mandaría poner en circulación una nueva tesis, la de la muerte pospuesta, Sin más explicaciones, A la iglesia nunca se le ha pedido que explicara esto o aquello, nuestra especialidad, además de la balística, ha sido neutralizar por la fe el espíritu curioso.

—Saramago, J. (2006). Las intermitencias de la muerte (Trad. Pilar del Río). Bogotá: Punto de Lectura.

7 de julio de 2012

Concierto

CONCIERTO EN ODIO MAYOR SOSTENIDO

Ese día te maldije como nunca antes lo había hecho, y no sólo deseaba que te pudrieras en ese puto hoyo del que tanto te he hablado, sino que yo misma estaría dispuesta, con uñas y dientes, a cavarlo para ti.